Seguramente por allí has oído hablar del Minimum Viable Product (MVP) o probablemente has escuchado sobre la teoría de Lean Startup.
Ambos conceptos están muy vinculados. La traducción del ingles "Lean" es algo así como "esbelto", "delgado", "flaquito"; o sea que cuando empiezas tu startup decides hacer tu emprendimiento muy delgadito, al grano vamos, gastando en lo básico y poniéndole el foco a lo que sirve. Y allí viene el MVP, que no tiene nada que ver con los premios esos del fútbol americano, sino que es el Producto Mínimo Viable. Es de este tema que queremos platicar hoy en nuestro blog.
Ese Producto Mínimo Viable (MVP, por sus siglas en inglés) es algo así como un productito empaquetado y sencillo que estás analizando para ver si sirve. Es lo más pequeño que puedes construir para ver si confiere al cliente una propuesta de valor. Gastas poco y pruebas rápido, con poco gasto.
Imagínate que eres un paletero de esos de los de carrito con campanitas por tierras calurosas, y solo haces de coco y de limón, ambas de agua, y quieres ver si tu nueva paleta de fresa se desplaza. Una opción que pudiera representar un gasto mínimo es hacer unas 10 de fresa, digamos; meterlas al mismo carrito y promocionarlas para ver si se venden. Hacer lo mismo durante unos 10 días. Eso te podrá decir si el mercado respondió bien a las de fresa. Y con esa información, podrás decidir si aumentas el gasto de producción y de marketing (Acelerar y Pivotear).
Lo mismo puede ocurrir con negocios que desplazan productos o servicios en la WEB. Creas una landing básica para tu producto o servicio. Pruebas ver si se desplaza metiendo algo de pauteo en tus redes durante algunos días. Por ejemplo, ¿conoces la estrategia de A/B testing para páginas web?
Utilizar la metodología de MVP te ayuda a no dar palos de ciego. Asegurarte que vas en buen camino con los resultados concretos de validación del mercado. Construyes prototipo, validas mercado, pruebas cambios, validas de nuevo, defines, aceleras, pivoteas. Parece algo así como una carrera: y justamente lo es.
En resumen, recomendamos para tu empresa echarle una explorada a esta metodología. Tener de inicio un producto al 100% terminado es poco cierto. Mejor agarra el atajo MVP como parte de tu estrategia de desarrollo. Aquí te ponemos unos tips para validar el MVP en el mercado:
1. Construye Prototipo. Ningún producto va a ser perfecto. Con el conocimiento que tienes del mercado, siéntate y piensa a quién esta enfocado tu producto y qué estas tratando de validar con lo que vas a hacer. Piensa en que tan viable es el producto, y que tan cerca está de lo que el mercado demanda. Necesitas conocer bien tu mercado. Acuérdate de la "V"... el producto mínimo debe ser Viable, lo cual significa que pueda desplazarse en la realidad (venderse y ser de utilidad).
2. Analiza y aprende de los resultados. Para que el experimento tenga sentido, hay que medir los resultados. Medir y aprender. ¿qué funcionó? ¿qué NO funcionó? ¿qué funcionó a medias, pero tenemos la sospecha que con un cambio podría funcionar mejor? Del experimento deben de salir nuevas acciones. Conclusiones, nuevos experimentos, en continuo análisis del mercado en circulo virtuoso.
3. ¿Qué hacer después de aprender de los resultados?
- Lo que funcionó: acelera. Hay que hacerlo con más forma.
- Lo que no funcionó: deséchalo y cambia el enfoque.
- Lo que funcionó a medias, hay que aprender del error o la imprecisión, hacer las modificaciones conducentes y probar de nuevo (Pivotea).
Esperamos que esta información te sea de mucha utilidad y puedas avanzar en optimizar tus productos y tu empresa.
